Muchos colombianos buscan el sueño americano de forma legal en los Estados Unidos. Entre sus metas pueden considerar adquirir propiedades, invertir en una franquicia o tener su negocio propio. Sin embargo, cuando la persona lo hace sin la planeación debida, desconociendo las leyes estadounidenses, incurrirán en errores, principalmente en materia fiscal y de impuestos.

Confundir residencia inmigratoria con residencia fiscal

Cuando la persona se convierte en residente fiscal debe pagar impuestos con base en su renta global, pero muchos confunden la residencia con la obtención de la Green Card. Aunque esto puede ser indicio de residencia fiscal, no es lo único, ya que puede resultar que la simple presencia física en Estados Unidos, independientemente del estatus migratorio, implique la residencia fiscal con las mismas obligaciones que un ciudadano americano.

No declarar el ingreso por los activos localizados fuera de Estados Unidos

Los extranjeros que se vuelven residentes fiscales de Estados Unidos están obligados a tributar sobre su renta global, tal cual como los ciudadanos americanos. Es un error común para los extranjeros que emigran no declarar ingresos de los activos extranjeros preexistentes al inicio de su residencia, así como también los activos financieros que le dan origen. Esta omisión puede resultar costosa y podría tener que pagar altas penalidades por no informar debidamente.

Ignorar el funcionamiento de la prescripción o Statute of limitations

En la mayoría de los países existe un proceso de prescripción fiscal por el cual no se puede exigir al contribuyente ninguna deuda anterior a un determinado período. Aunque en EE.UU. existe esta prescripción, llamada Statute of limitations por 6 años, esta sólo operará cuando una declaración haya sido presentada y no cuente con errores sustanciales. Es decir que si un contribuyente no lo hizo en años anteriores, dicho período fiscal que todavía está abierto puede ser revisado.

No usar adecuadamente los tratados para evitar doble tributación con Estados Unidos

Estados Unidos ha firmado acuerdos para evitar la doble tributación con 68 países, los cuales entregan beneficios a los residentes de los dos países para disminuir el impacto impositivo. En ocasiones, por desconocimiento, estos beneficios no se utilizan bien para disminuir la carga tributaria.

Existe un impuesto a las donaciones y a la herencia

El impuesto sucesoral o impuesto a la herencia (Estate Tax), el impuesto a las donaciones (Gift Tax) y el impuesto a la renta (Incometax) son los impuestos federales más importantes en Estados Unidos. Sus tasas ascienden hasta el 40 % y por lo tanto una inadecuada planificación producirá pérdidas significativas.

Ignorar implicaciones impositivas que tienen las diversas entidades

Muchas personas que llegan a EE.UU. constituyen una empresa sin tener en cuenta el tratamiento impositivo. Las corporaciones son estructuras de doble tributación, a diferencia de las entidades transparentes (pasthroughentities), como las Limited Liability Companies, que no están sujetas a impuestos, sino que sus miembros son quienes están obligados a pagar el impuesto por sus ingresos. Por esta razón, se debe seleccionar inteligentemente la entidad a usar ya que esto redundará en mayor o menor carga impositiva.