La pandemia del COVID-19 ha ocasionado que los revisores fiscales y auditores tengan que desarrollar de forma virtual muchos de sus procedimientos y pruebas, tales como entrevistas o inspecciones de documentos.
Por ese motivo, a continuación compartiremos algunos aspectos clave que pueden serle de gran utilidad al momento de desarrollar una auditoría de forma virtual.
- Definir qué procedimientos se pueden realizar de forma virtual
El revisor fiscal o el auditor debe iniciar definiendo con su cliente qué procedimientos se pueden realizar de forma virtual y cuáles no. Algunos de los procedimientos que pueden realizarse de forma virtual son los siguientes:
- Planeación de la revisoría fiscal o la auditoría.
- Revisión analítica preliminar y final de los estados financieros.
- Indagaciones y entrevistas virtuales.
- Pruebas de control automáticas.
- Controles generales de los sistemas informáticos.
- Pruebas sustantivas mediante documentos escaneados.
Otros sin embargo deberán seguirse desarrollando de forma presencial, pues de otra forma no serían confiables para su utilización en el encargo:
- Toma física de inventarios.
- Arqueos de caja.
- Inspecciones al área de producción.
- Ajustar el plan de trabajo
El revisor fiscal o el auditor deben ajustar su plan de trabajo, para que los procedimientos y pruebas que no se hayan podido desarrollar por causa del confinamiento se reprogramen y realicen de forma virtual o presencial, según el análisis realizado en el punto anterior.
- Programar adecuadamente entrevistas y reuniones virtuales
Cuando el revisor fiscal o auditor requiera llevar a cabo entrevistas o reuniones virtuales debe considerar, entre otros, los siguientes puntos:
- Verificar la disponibilidad de tiempo de los asistentes (empleados, directivos, socios u otros).
- Revisar con antelación el funcionamiento de las herramientas que se utilizarán (Teams, Google Meet, etc.).
- Organizar la documentación que se requiere presentar en la reunión, en caso de que sea necesario escanear documentos o compartirlos en línea.
- Asegurarse de que se cuenta con una buena conexión a internet.
- Ser amable y mantener una interacción constante, para lograr la atención de los participantes en la reunión.
- Respetar el tiempo de la reunión.
- Analizar el surgimiento de nuevos riesgos
La mayoría de las entidades han implementado el trabajo en casa para muchos de sus empleados. Esto puede traer riesgos que el auditor debe considerar al momento de desarrollar sus pruebas, en especial en lo relacionado con la revisión de documentos.
Si el revisor fiscal o el auditor efectúan revisiones de documentos escaneados o haciendo uso de herramientas que permitan acceder a la pantalla del computador de los empleados, es importante que se aseguren de tomar medidas para mitigar los riesgos que pueden presentarse respecto a la veracidad y autenticidad de los documentos.
- Asegurarse de documentar adecuadamente los procedimientos
Aunque muchos de los procedimientos de auditoría no se puedan desarrollar de forma presencial, no se debe descuidar la documentación del encargo, pues, como es sabido, esta es la fuente que tienen el revisor fiscal o el auditor para emitir sus conclusiones al final de encargo, y la que les servirá de prueba ante los clientes y terceros para comprobar que el trabajo se ejecutó de forma adecuada.
Por ello, si se envían comunicaciones por correo electrónico o se realizan presentaciones por video llamadas, se deben tomar medidas para documentarlos adecuadamente, tales como archivar las comunicaciones y su recibido o grabar el audio de las reuniones.